3 diferencias vitales entre un autoempleado y un empresario

eldaaldia/ 09/08/2022

Normalmente, para hacer un cambio significativo en nuestras vidas, lo primero que debe existir es el descontento, inconformidad o esas ganas de poder alcanzar algo más grande, aunque signifique un riesgo. Por eso muchas personas pasan de ser asalariados o empleados, para trabajar por su cuenta y convertirse en su propio jefe.

Si en este momento te sientes así o estás pensando en renunciar a tu trabajo actual para enfocarte en nuevos objetivos, mira en Gananci estas 9 razones para saber si es el mejor momento para hacerlo. Todo conlleva un riesgo, lo bueno es que generalmente mientras más alto el riesgo, más altas también serán las ganancias.

Eso sí, cuando se da este cambio tan radical hay que decir bien hacia donde se apunta porque hay personas que desean ser trabajadoras independientes en su propia área, mientras que otros desean convertirse en emprendedores o empresarios. Puede que haya puntos de convergencia entre estos dos, pero también hay grandes diferencias las cuales conocerás a continuación:

-Dependencia: cuando una persona es autoempleado, todo depende de ella. Es decir, sus ingresos serán acordes al nivel que dedique a su trabajo, su productividad se verá limitada a lo que su cuerpo (y mente) pueda hacer y cuando no esté disponible, simplemente no estará generando ningún tipo de ganancias.

Muchos plomeros, abogados, electricistas, carpinteros, corredores de seguros ejercen de esta manera, por nombrar algunas profesiones. Esto les brinda la oportunidad de pulirse en su oficio, de tener un horario flexible y ganar más dinero cuando son buenos en lo que hacen.

Por otro lado, los empresarios son el cerebro de su emprendimiento, más no siempre la mano de obra. Quizá al principio, cuando se está comenzando, su negocio sí depende completamente de él, pero a medida que pasa el tiempo, contrata personal y comienza a delegar las actividades. Esto hace que él puede incluso ausentarse de su empresa mientras sigue ganando dinero, siempre y cuando los empleados estén debidamente capacitados y exista una cultura organizacional sólida.

-Diversificación: otra gran diferencia es la diversificación. Mientras los autoempleados tienen que dedicarle gran parte de su tiempo a su trabajo para que este funcione, los empresarios tienen la oportunidad de realizar otros emprendimientos o invertir sus horas en diferentes actividades que no tienen que ser exclusivamente inherentes a su empresa.

Esto no significa que no trabajen, si lo hacen, pero más que estar presentes se encargan de actividades de más alto nivel (como crear convenios, manuales para mejorar los procesos, ect). Además, al tener varios empleados las horas de productividad se incrementan. Siempre se logra más trabajando en equipo cuando el objetivo es claro, existe motivación y los procedimientos adecuados.

Además, hay que mencionar que los empleados que se sienten identificados con la empresa en la que laboran, rinden mucho más. Para ayudarte en este tema, aprende cómo fidelizar a tus trabajadores.

-Responsabilidad: por último, la tercera diferencia más grande es la responsabilidad que tienen los empresarios y los autoempleados. La responsabilidad de estos últimos se limita su familia, a sí mismos, a sus clientes y proveedores. Mientras que la responsabilidad de los empresarios va más allá. Aparte de ser responsables por los mismos aspectos de un autoempleado, también se le suma la responsabilidad que debe tener por cada una de las personas que laboran a su cargo.

Es decir, si es responsable de pagar sus salarios, de su seguridad personal, laboral, entre otros aspectos y no hay nada que lo libere de esa responsabilidad. Un empresario no puede decir a sus empleados que un mes no les pagará porque no tuvo suficiente utilidad o porque debe hacerse cargo de gastos que no tenía contemplados.

Estos son riesgos que toman los empresarios y por los cuales no cualquier persona se atreve a estar en esta categoría. Lo más común es que los empresarios sean autoempleados que han tenido una visión más amplia y han utilizado todos sus conocimientos y experiencia para expandir su área de alcance. Ambas son categorías admirables con sus pros y sus contras.