A la hora de crear una empresa hay que elegir la forma jurídica que mejor se adapte a la actividad que vayamos a desarrollar. En España existen diferentes tipos de sociedades, cada una con sus propias características, ventajas y desventajas.

Pero antes de hablar de cada tipo de sociedad con sus correspondientes características, debemos distinguir el empresario como persona física (empresario individual) y de sociedades civiles, anónimas y limitadas, etc.. En este segundo caso sí se podrá elegir el tipo de sociedad que se considere más oportuno.

El empresario individual

Hacerse autónomo es una de las opciones más extendidas para ejercer como empresario, sin que actúe ningún tipo de sociedad. Sólo será necesario estar en posesión legal para ejercer como empresario individual. Una de sus principales ventajas es la inmediatez del trámite. Hay que decir que hoy en día se pueden crear empresas de forma rápida y con unos reducidos costes. No requiere de ningún tipo de aportación al capital social de la empresa, ya que esta no existe. Su fiscalidad es mucho más simple que el de las empresas, ya que los autónomos no tienen que declarar el impuesto de sociedades. Estos tributan a través de la declaración de la renta. La gran desventaja que presenta es la responsabilidad que deberá asumir por sus actos. En caso de deudas, deberá responder con su patrimonio.

Sociedades civiles

La Sociedad Civil es una forma sencilla de asociación entre personas con un proyecto empresarial común. Consiste en un contrato privado de colaboración entre dos o más personas en el que ponen en común bienes, dinero o trabajo con el propósito de repartir entre sí las ganancias.

Desde 2016 este tipo de sociedades se consideran una sociedad mercantil, por lo que deben de tributar por el impuesto de sociedades, cosa que anteriormente no sucedía ya que tenían que hacerlo por el IRPF.

Como ventaja se puede decir que su constitución formal es más sencilla y barata que una sociedad mercantil. No es necesaria Escritura Púbica ante notario ni inscribirlas en el Registro Mercantil. Bastará con realizar una escritura pública cuando se aporten bienes inmuebles o derechos reales, pero aun así no es posible inscribirlas en el Registro Mercantil. Su gran desventaja es que, como en el caso del empresario individual, la responsabilidad de los socios es ilimitada ante deudas con terceros.

Sociedades mercantiles

Una sociedad mercantil es aquella entidad cuyo objetivo es la realización de actos de comercio sujeta a derecho mercantil. Se diferencia de una sociedad civil en el hecho de que esta última no contempla en su objeto social actos mercantiles. El código civil la define como “un contrato en que dos o más personas estipulan poner algo en común con la mira de repartir entre sí los beneficios que de ello provengan”.

Posee personalidad jurídica propia y distinta de sus miembros, y que contando también con patrimonio propia, canalizan sus esfuerzos a la realización de una finalidad lucrativa que es común.

En España se encuentran reguladas por el Código de Comercio y una serie de leyes específicas.

A continuación detallamos los diferentes tipos que existen:

• Sociedad Limitada
• Sociedad Limitada de Nueva Creación
• Sociedad de Responsabilidad Limitada
• Sociedad Anónima
• Sociedad Colectiva
• Sociedad Cooperativa y Agrupaciones de interés económico
• Sociedad Comanditaria
• Sociedad Comanditaria por Acciones
• Sociedad Laboral
• Asociaciones sin ánimo de lucro

eldaaldia